La electrocirugía es una técnica muy sencilla, rápida y útil para el tratamiento de diversos procesos dermatológicos.
Existen dos tipos de electrocirugía:
• Electrodesecación que destruye las lesiones a través de la deshidratación causada por golpes repentinos de corriente eléctrica.
• Electrocoagulación, mediante una paqueña aguja de tratamiento se transmite una corriente eléctrica caliente que coagula la lesión.
La electrocirugía está especialmente indicada para las siguientes lesiones de la piel:
Es un proceso ambulatorio que puede realizarse en consulta y que no precisa de cuidados post-tratamiento más allá de las medidas profilácticas indicadas por nuestro especialista.